Tras una imponente fachada de arquitectura palaciega se esconde Palacio Torre-Almiranta, un edificio que aún conserva su esplendor y elegancia clásica.
Sus fantásticos detalles, tanto constructivos como decorativos, hicieron de este lugar un referente del Madrid moderno de la época.
Proyectado por el destacado arquitecto Eduardo de Adaro como Casa-Palacio para el Vizconde Torre-Almiranta, este edificio es un magnífico ejemplo de la arquitectura civil urbana de finales del siglo XIX.
Palacio Torre-Almiranta habla de su historia y su futuro a través de una sorprendente rehabilitación, fruto del talento y la excelencia de Touza Arquitectos y Lázaro Rosa-Violán Studio.
Touza Arquitectos
LÁZARO ROSA VIOLÁN Studio
Con un enfoque respetuoso, se han restaurado elementos protegidos como el portal, las escaleras, las molduras y las vidrieras.
Una combinación perfecta que encarna la sofisticación barroca, con una interpretación innovadora de la vida actual.